jueves, 19 de julio de 2012

Embarazada

En estos días mi esposo y yo cumplimos cuatro años de casados. Cumplí también, de cierta forma, cuatro años de estabilidad emocional y de salud en general. Todavía detecto cómo, cuando el trabajo y el estrés me abruman, viene inevitablemente una racha de mal humor o de tristeza. Pero hemos sabido lidiar con eso.
Ahora, nos hemos enterado que estamos esperando un bebé. Me entusiasma la idea, por supuesto, y me siento muy contenta. Pero, por otro lado, me da un poquitín de miedo. Miedo porque en estos meses me he involucrado –otra vez– en muchos proyectos, y temo que voy a tener que renunciar a alguno o a algunos.
Si de por sí para cualquier mujer la noticia de un bebé implica un reajuste en su vida. No quiero decir que sea más difícil o más fácil, supongo que como quiera es un reto. Un reto que se asume con amor, eso sí. Es sólo que no puedo evitar sentir un poco de temor y de dudas, sobre todo: ¿lo haré bien? ¿Seré una buena madre?